Freedom and Despair Bitcoin atrae a diferentes personas por diferentes razones

Título original: La relación entre la hiperinflación y Bitcoin

En tiempos de agitación que pueden resultar de una crisis de posguerra o una recesión prolongada en la economía de un país, las personas a menudo tienen que recurrir a reservas de valor que se han convertido en salvavidas: metales preciosos, monedas y, en el siglo XXI, criptomonedas como Bitcoin o Ethereum.

Esta publicación explora cómo Bitcoin se ha adoptado más rápido en algunas regiones que en otras, no por un impulso libertario, sino por desesperación.

Junto con Argentina y Líbano, Venezuela es uno de esos países que adoptó Bitcoin porque no tenía otra opción.

Según un estudio publicado por el Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas, la severa contracción económica y la inestabilidad política de Venezuela han provocado que uno de cada tres ciudadanos (32,3%) experimente inseguridad alimentaria y necesite asistencia. En situaciones como esta, las familias están acostumbradas a las estrategias de afrontamiento relacionadas con los alimentos: reducir las porciones, aceptar alimentos como pago por el trabajo y, como verá en breve, invertir en Bitcoin como reserva de valor.

Solo en la primera semana de abril de 2021, el intercambio de criptomonedas entre pares LocalBitcoins intercambió alrededor de 9 mil millones de bolívares en la plataforma.

BTC supera la marca de los $32 000 con un aumento intradiario del 1,02 %: los datos de Huobi Global muestran que BTC ha subido a corto plazo, superando la marca de los $32 000, y ahora cotiza a $32 003,4, con un aumento intradiario del 1,02 %. el mercado fluctúa mucho, así que haga un buen trabajo en el control de riesgos. [2021/7/16 0:56:40]

Dugleidi Salcedo prepara arepas para sus tres hijos en la cocina de la favela de Petare en Caracas, Venezuela, en febrero de 2019, quejándose con los vecinos por los altos precios de los alimentos.

La economía de Venezuela, basada en gran medida en los sectores manufacturero y petrolero, mostró un crecimiento constante desde la década de 1950 hasta principios de la de 1980. Sin embargo, durante la caída del precio del petróleo de la década de 1980, la economía se contrajo, la moneda se devaluó gradualmente y la inflación aumentó considerablemente, alcanzando un máximo del 84% en 1989 y un 99% en 1996. Desde entonces, esas tasas solo han aumentado, superando el millón por ciento en 2018 bajo la presidencia de Nicolás Maduro.

En 2018, el gobierno venezolano anunció una nueva criptomoneda nacional, el petro, vinculada a las reservas de petróleo y no vinculada al dólar estadounidense. Para Maduro era importante lanzar una moneda soberana nacional para evitar las sanciones de EE. UU., por lo que eligió las criptomonedas. Las sanciones fueron en respuesta a la represión durante las protestas venezolanas en 2014, una conspiración de drogas acusada por Estados Unidos en 2016, protestas venezolanas en 2017, actividades durante las elecciones a la Asamblea Constituyente venezolana en 2017 y elecciones presidenciales venezolanas en 2018. La prohibición incluye congelar cuentas y activos personales, prohibir transacciones con partes sancionadas, incautar activos, un embargo de armas y restricciones de viaje.

David Smolansky, de Public Radio International, dijo que las sanciones se dirigieron a las "élites" de Maduro y el chavismo y tuvieron poco efecto en los venezolanos comunes. Sin embargo, resulta que tienen un impacto. Como informan algunos lugareños, hace meses que no usan el bolívar porque ha perdido completamente su valor.

Según un informe de Chainalysis, los venezolanos representan el tercer mayor número de transferencias en LocalBitcoins y Paxful, dos de los intercambios entre pares más populares del mundo.

En 2021, la situación económica del país se parece mucho a la Alemania de Weimar en la década de 1920, y similar a la situación actual en Zimbabue y el Líbano, donde la perspectiva de hiperinflación a raíz de la pandemia se ha vuelto muy real.

Asimismo, Líbano ha visto un aumento significativo en las compras de Bitcoin. En un país con un sistema bancario colapsado, el oro digital parece ser una reserva de valor más estable y confiable que una moneda nacional. No es de extrañar que la gente esté recurriendo a las criptomonedas.

En el Líbano, por otro lado, el comercio de bitcoins es más difícil que en Venezuela, donde el gobierno apoya el desarrollo de la industria de las criptomonedas. Los usuarios libaneses no pueden usar tarjetas de crédito para comprar Bitcoin y los bancos tienen restricciones sobre los retiros.

Bitcoin atrae a diferentes personas por diferentes razones. Para muchos, ni siquiera se trata de hacerse rico rápidamente. Se trata de proteger los bienes personales, mantener segura a su familia o prepararse para los tiempos difíciles que se avecinan.

La hiperinflación que continúa en Venezuela, dejando a millones de personas hambrientas y angustiadas, puede no ser familiar para la mayoría de los lectores, ni es probable que sea el caso en la mayoría de los países. Sin embargo, con todo lo que sucede en el mundo, desde la impresión excesiva de dinero hasta los cierres, ahora es el momento de hacer un balance y prepararse para los años venideros.

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